Cree
que la iniciativa ciudadana salió adelante "a pesar" de los miembros
de la Plataforma, que "querían lo contrario"
MADRID
El diputado de Unión, Progreso y Democracia
(UPyD) Carlos Martínez Gorriarán ve como unos "cafres" a los miembros
de la Plataforma de Afectados por la Hipoteca (PAH) que ayer desde la tribuna
de invitados del Congreso "insultaron y amenazaron" a los diputados,
a la vez que considera "vergonzoso" que los miembros de Izquierda
Plural aplaudieran su actuación.
"El momento vergonzoso del día: IU
aplaudiendo a rabiar a los cafres de su plataforma que insultaban y amenazaban
a diputados en el Congreso", escribió este martes Gorriarán en su cuenta
de Twitter tras el debate en el que se aceptó la tramitación de la iniciativa
ciudadana en favor de la dación en pago.
En diversos comentarios publicados en la red
social, recogidos por Europa Press, el diputado de UPyD lamenta la actuación de
estos activistas, que fueron desalojados de la tribuna por los servicios de la
Cámara, y advierte de que su actitud empañó la decisión adoptada en el Pleno.
Gorriarán también lamenta que los medios de
comunicación reprodujesen la escena --"los medios ayudan mucho a los más
idiotas"-- y aventura que la iniciativa ciudadana salió adelante "a
pesar" de los miembros de la Plataforma, que "querían lo
contrario". "Se aprobó a su pesar y eso les ha cabreado. Querían lo
contrario", sostiene.
GRITOS
Y EXPULSIÓN
Los incidentes tuvieron lugar en el Pleno
del Congreso nada más acabar el debate de la Iniciativa Legislativa Popular
(ILP). Los activistas de la Plataforma, que asistían como invitados a la sesión
plenaria, se pusieron en pie gritando "sí se puede, sí se puede",
celebrando la decisión de última hora del PP de aceptar la toma en
consideración de su iniciativa.
"Procedan a su expulsión", ordenó
el presidente del Congreso, Jesús Posada, mientras desde el hemiciclo los
diputados de Izquierda Plural (IU-ICV-CHA), que llevaban camisetas con el lema
'Stop Desahucios', aplaudían en pie a los activistas.
Uno de los activistas fue detenido proferir
insultos desde la tribuna, mientras que los agentes de seguridad llevaron al
resto a una sala donde se les tomaron los datos, como es habitual en este tipo
de incidentes, y después se les instó a abandonar la sede parlamentaria.
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